LA CASPA: 1 DE CADA 2 PERSONAS AFECTADA
Este fenómeno recurrente puede desencadenarse por factores como el estrés, el cambio de estación o incluso el uso de productos de higiene inadecuados.
Existen dos tipos de caspa:
- la caspa seca, blanca y fina que cae en copos sobre los hombros y
- la caspa grasa, más gruesa, amarillenta y asociada a un cuero cabelludo graso.
La aparición de caspa se debe a un desequilibrio en la superficie del cuero cabelludo: la presencia de sebo y la multiplicación de la flora bacteriana pueden provocar irritaciones y traducirse en sensaciones de picor.
Para tratar la caspa, es necesario una combinación de activos complementarios:
- Reequilibrar la flora bacteriana con activos antifúngicos
- Eliminar la caspa con activos queratolíticos
- Calmar el cuero cabelludo irritado.
Existen soluciones eficaces para eliminar la caspa. Una forma de tratamiento sencilla son los champús anticaspa, siempre adaptados a cada cuero cabelludo.