Paso 1: limpieza meticulosa

Antes de aplicar cualquier producto para el cuidado de las uñas de las manos, es esencial eliminar las impurezas o restos de esmalte de uñas. Para empezar, limpia las uñas con un algodón absorbente empapado en quitaesmalte sin alcohol ni acetona; a continuación, lava las manos con agua tibia y un jabón suave. Sécalas muy bien.

Paso 2: exfoliación suave

Aunque la exfoliación facial y corporal es un hábito para muchos de nosotros, no solemos pensar en dar a nuestras manos el mismo tratamiento. Y, sin embargo, ¡no hay nada mejor para lograr una piel increíblemente suave en un abrir y cerrar de ojos!

Aplica el exfoliante para manos masajeando suavemente con un movimiento circular, empleando tiempo extra en las cutículas. Existen muchos exfoliantes específicos para manos y uñas, pero también puedes usar simplemente tu exfoliante facial habitual.

Paso 3: remedios de belleza 

• Para nutrir y fortalecer las uñas: opta por una crema o mascarilla especialmente formulada para uñas, y deja actuar durante aproximadamente 10 minutos. Después, si es necesario, aplica una capa de fortalecedor de uñas, que puede actuar también como una capa de base para tu esmalte.

• Para las cutículas: utiliza un producto especial, normalmente oleoso, que nutrirá y suavizará las cutículas y hará que sea más fácil empujarlas de vuelta hacia el borde de la uña.

Paso 4: hidratación intensa

Para terminar, aplica una capa muy gruesa de crema nutritiva de manos y uñas, como lo harías con una mascarilla. Déjala actuar durante 30 minutos. Puedes ponerte unos guantes plásticos si deseas continuar con tus actividades entretanto. Después, masajea tus manos para garantizar que la piel absorba el exceso de crema, prestando especial atención al contorno de la uña.